ABB fue pionera en desarrollar el primer robot industrial del mundo alimentado con energía eléctrica y el primer robot industrial de pintado del mundo hace casi 40 años atrás.
Hoy en día, ABB mantiene un liderazgo en las tecnologías y en el mercado de robótica, con más de 160.000 robots actualmente operativos en todo el mundo. Ésta es la base instalada más grande de cualquier fabricante de robótica.
El impacto de estos robots sobre los procesos de fabricación y la productividad industrial ha sido revolucionario. La habilidad que poseen estos robots para llevar a cabo la misma secuencia de tareas, a una velocidad y precisión que los seres humanos no pueden alcanzar, ha traído enormes beneficios a los fabricantes y ha mejorado de manera radical las condiciones de trabajo de sus empleados.
ABB tiene, literalmente, miles de instalaciones donde las soluciones robóticas han logrado importantes incrementos en la producción y en la calidad de los productos, así como también significativas reducciones de tiempo de parada, costos operativos y mano de obra humana.
Las tareas monótonas o peligrosas, como levantar y trasladar objetos pesados, han sido eliminadas y se han reducido los altos costos de tareas de movimiento de mercadería. Los beneficios abarcan distintas áreas y son muy importantes.
La mayoría del tiempo estamos usando algún producto que ha sido fabricado o que ha pasado por un robot ABB.
Los robots ABB tienen un rol importantísimo, aunque invisible, en nuestra vida diaria. Desde el momento en que nos despertamos hasta el momento que nos vamos a dormir, muy poco tiempo pasa sin que utilicemos un producto, electrodoméstico o parte de un equipo que ha sido fabricado por un robot ABB. Por ejemplo:
Los robots ABB levantan, envasan y ubican en pallets la comida y snacks que comemos, y las bebidas que tomamos, para empresas como Nestlé, Unilever y Cadbury.
Ellos tallan, pulen, barnizan, pintan, empaquetan y ubican en pallets los muebles y los pisos de nuestras casas para dos de las principales marcas del rubro, IKEA y Tarkett.
Ellos sueldan, arman, lustran y pintan nuestras PCs, notebooks, iPODs, celulares, cámaras y consolas de juegos para las marcas y fabricantes líderes del mundo, como Apple, Dell, Foxconn, Hewlett Packard, Motorola, Nokia y muchas más.
Ellos fabrican los paneles solares que están en nuestros techos, los vidrios de nuestras mesas, los materiales de construcción que se encuentran en nuestros hogares, los cerámicos de nuestros baños, y las cocinas, lavavajillas, contenedores plásticos, armarios de madera y las piletas metálicas de nuestras cocinas.
Y cuando estamos enfermos, las pastillas y otros medicamentos que tomamos son levantados, envasados y ubicados en pallets por medio de robots ABB en empresas como AstraZeneca, GlaxoSmithKline, Johnson & Johnson y Schering-Plough.
También los autos, colectivos y camiones que manejamos son fabricados, ya sea por completo o en partes, por robots ABB. La mayoría de los fabricantes de automóviles y sus principales proveedores de cubiertas usan soluciones robóticas de ABB para algunos o todos sus procesos de fabricación: montaje de chasis, automatización de prensas, para la carrocería y para pintar el producto final.
ABB ofrece una oferta completa en soluciones robóticas, incluyendo robots y controladores, equipos y software para aplicaciones, celdas fabricadas a medida, y un servicio y soporte técnico global. Además brinda apoyo a sus clientes por medio de sus instalaciones en Asia, Europa, América del Norte, y a través de la venta y de sus servicios técnicos en más de 45 países.