Conseguir reducir costes puede ser un factor clave para el éxito financiero de su organización. Este ejemplo ficticio demuestra hasta qué punto puede ser importante.
El balance económico para un ejercicio en el que se reducen los gastos un mínimo 1% es sorprendente. En cuanto al saldo final, en la figura siguiente se demuestra que se obtiene el mismo resultado disminuyendo un 1% los costes que aumentando un 8% las ventas.
No hace falta destacar la dificultad intrínseca de pretender aumentar un 8% las ventas, más especialmente dada una coyuntura económica de estancamiento. En cambio, resulta mucho más fácil intentar disminuir un 1% los costes. En cuanto a la factura energética -que en muchas industrias llega al 20% o 30% de sus gastos-, la implementación de algunos equipos para la eficiencia energética repercute en un menor consumo eléctrico que, a su vez, conlleva una disminución significativa de los costes.
Caso hipotético | Situación inicial | Caso1 Reducción 1% costes | Caso 2 Incremento 8% ventas |
Facturación | 100€ | 100€ | 108€ |
Coste | 80€ | 79,2€ | 86,4€ |
Margen bruto | 20€ | 20,8€ | 21,6€ |
S&A costes | 10€ | 10€ | 10,8€ |
Beneficios | 10€ | 10,8€ | 10,8€ |