- Desde su invención hace 100 años, los interruptores magnetotérmicos han transformado la seguridad eléctrica, protegiendo de sobrecargas y cortocircuitos a hogares y grandes infraestructuras.
- En un mundo que avanza hacia la energía renovable, los interruptores magnetotérmicos son clave para gestionar las redes eléctricas, asegurando la protección de instalaciones.
- Con el avance hacia una energía limpia y la disminución de los combustibles fósiles, los interruptores magnetotérmicos continúan siendo fundamentales para la seguridad eléctrica.
Hace exactamente 100 años, la innovación transformadora del interruptor magnetotérmico (MCB) cambió para siempre el panorama de la seguridad eléctrica. Este dispositivo revolucionario, que combina una unidad de disparo térmica y magnética en un solo mecanismo, protege los circuitos eléctricos contra sobrecargas y cortocircuitos, interrumpiendo la corriente y permitiendo su rearme sin la necesidad de sustituir componentes repetidamente.
Dado que casi una cuarta parte de los incendios se producen en edificios residenciales, es seguro afirmar que los interruptores magnetotérmicos no sólo revolucionaron nuestra forma de vivir al permitir hogares seguros, sino que también facilitaron la seguridad eléctrica en toda la sociedad; desde las infraestructuras ferroviarias hasta los edificios comerciales y los centros de datos.
Un siglo después, más esenciales que nunca
La innovación en esta tecnología es vital en la gestión eficiente de redes eléctricas que integran fuentes de energía renovable. ABB, líder en esta evolución, opera con ocho plantas de fabricación en todo el mundo, produciendo más de 100 millones de polos anualmente. Desde su primera patente, el magnetotérmico de ABB ha liderado el mercado en rendimiento, tamaño compacto, y capacidad de conexión y transparencia.
Interruptores magnetotérmicos en la era de la transición energética
El crecimiento de fuentes de energía renovables como la solar y la eólica, junto con tecnologías emergentes como los vehículos eléctricos y el almacenamiento energético, está generando un cambio dinámico en el suministro y la demanda de electricidad. A medida que avanzamos hacia la neutralidad de carbono, se incrementa la presión sobre las redes eléctricas para gestionar cargas más impredecibles.
En ABB, nuestros interruptores magnetotérmicos detectan fallos eléctricos como cortocircuitos y sobrecargas, desconectando el circuito en 10 milisegundos, 10 veces más rápido que un abrir y cerrar de ojos. Proporcionamos seguridad eléctrica a todo, desde paneles solares y bombas de calor hasta vehículos eléctricos, y con nuestra completa gama de dispositivos protegemos contra fallos como corrientes residuales, sobretensiones, corrientes de defecto a tierra o fallos de arco.
Actualización de infraestructuras
Los dispositivos de protección actuales hacen que tanto los edificios nuevos como los antiguos sean más seguros, inteligentes y sostenibles. Los diseños compactos permiten la retro adaptación, incluso en edificios históricos donde el espacio es limitado, lo que resulta especialmente útil en Europa, donde al menos el 40% de los edificios se construyeron antes de los años sesenta.
Nuestros productos eléctricos, como los interruptores magnetotérmicos, destacan por su diseño compacto, modular y flexible, facilitando la adaptación de edificios y la integración segura de energías renovables. Estas soluciones, desde pequeñas instalaciones hasta grandes ciudades, son clave para crear entornos seguros y sostenibles, garantizando la protección de los sistemas energéticos del futuro y apoyando el objetivo de lograr cero emisiones.