El lunes 5 de septiembre tuvo lugar el acto de conmemoración de los 100 años del centro de investigación y desarrollo (Corporate Research Center) de ABB en Västerås, el más antiguo de ABB. En el evento estuvieron presentes el rey de Suecia, Carlos Gustavo XVI, el Ministro de Industria Sueco, Ibrahim Baylan y el CEO de ABB Ulrich Spiesshofer, además de muchas otras personalidades de los sectores público y empresarial de Suecia.
Joham Söderström, Country Managing Director de ABB en Suecia, comentó durante el acto: "Los avances alcanzados por el equipo de investigadores del centro de Västerås han contribuido a definir el mundo en el que vivimos. Sin embargo, el verdadero éxito de este centro radica en la colaboración a nivel global y en una mirada continua hacia el futuro. Queremos que los próximos 100 años sean igual de exitosos, colaborando con start-ups y otros socios de negocio para ser más ágiles e incrementar la velocidad en la que el valor agregado de nuestros avances tecnológicos llegue al mercado."
Cuando inició sus actividades en 1916, el primer proyecto de investigación del centro fue el desarrollo de un rotor de acero niquelado para un turbocompresor de la central eléctrica local. Desde entonces, sus científicos han logrado o contribuido a lograr numerosas innovaciones y nuevas tecnologías en los campos de la electricidad y la automatización.
Entre las innovaciones más conocidas del CRC está el robot industrial, que ha revolucionado completamente las líneas de producción en sectores como el de la fabricación de automóviles. Björn Weichbrodt fue uno de los dos diseñadores del centro a los que se pidió que diseñaran un robot en 1971, y ha llegado a ser conocido como el padre de los robots industriales tras dirigir el desarrollo del IRB 6. Éste fue el primer robot antropomórfico de alimentación eléctrica del mundo, y estaba controlado por microprocesador. Los robots IRB 6 siguen estando en servicio en la actualidad.
El CRC de Suecia es también responsable de varias innovaciones en el transporte de electricidad a alta tensión en corriente continua (HVDC). Ello ha permitido a ABB mantener su liderazgo tecnológico en este campo, desde que la tecnología estuvo disponible en la década de 1950. Por ejemplo, en la década de 1990, el CRC desarrolló HVDC Light, que ha llegado a ser la tecnología preferida para aplicaciones como la conexión de parques eólicos a la red, la interconexión de redes eléctricas y la alimentación a plataformas petrolíferas desde tierra; todo ello con cables subterráneos o submarinos.
Otras innovaciones importantes hechas realidad por el CRC de Suecia son las siguientes:
- El primer interruptor para corriente continua en alta tensión, una innovación que hace posible que las redes eléctricas de alta eficiencia utilicen corriente continua
- El cable de más alta tensión, que permite la interconexión de redes eléctricas, y la integración de grandes cantidades de energía renovable en la red
- El primero de un nuevo tipo de motores eléctricos de alta eficiencia
- El primer agitador electromagnético de metales fundidos
- El primer regulador de tomas, una especie de caja de cambios para alta tensión
- Los primeros transformadores de 400 y 800 kV
En el centro trabajan más de 250 personas de 50 países, que tiene relaciones estrechas en Suecia con cinco universidades estratégicamente seleccionadas: KTH, Uppsala, Chalmers, Linköping y Mälardalen.